Infecciones bacterianas en la infancia: ¿una nueva clave en el aumento de cáncer colorrectal

La Universidad de California en San Diego (UCSD) revela una posible conexión preocupante entre infecciones tempranas y el riesgo de cáncer en adultos menores de 50 años.
En las últimas décadas, el cáncer colorrectal, históricamente considerado una enfermedad de adultos mayores, ha mostrado un aumento alarmante entre adultos jóvenes. Ahora, un equipo de investigadores de la Universidad de California en San Diego sugiere que infecciones bacterianas sufridas durante la infancia podrían ser una pieza clave para entender este fenómeno.
El microbioma intestinal bajo la lupa
El intestino humano alberga un vasto ecosistema de microorganismos conocido como microbioma intestinal. Este microbioma no solo ayuda a digerir los alimentos, sino que también regula el sistema inmunológico y protege contra diversas enfermedades.
Según el estudio de la UCSD, infecciones bacterianas comunes en la infancia —como aquellas causadas por Salmonella, Shigella o ciertas cepas de E. coli— podrían alterar de manera permanente este delicado equilibrio. Los científicos plantean que dichas alteraciones pueden desencadenar:
Inflamación crónica: el daño persistente a los tejidos del colon crea un ambiente propicio para la formación de células cancerosas.
Disbiosis: desequilibrio entre bacterias “buenas” y “malas”, debilitando las defensas naturales del cuerpo.
Modificaciones inmunológicas: el sistema inmunitario puede volverse menos eficaz en la detección de células anormales.
Estas condiciones podrían, décadas más tarde, favorecer el desarrollo de tumores malignos en el intestino grueso.
¿Qué bacterias están en la mira?
Entre los principales sospechosos se encuentran:
Fusobacterium nucleatum: ya vinculada previamente con tumores de colon.
Escherichia coli (cepas patogénicas): algunas variantes pueden liberar toxinas que dañan el ADN celular.
Salmonella y Shigella: asociadas con episodios de diarrea severa y colitis infecciosa.
El patrón emergente sugiere que no todas las infecciones gastrointestinales tienen el mismo impacto, sino aquellas que causan inflamación severa y persistente.
¿Cómo afecta esto al aumento de casos en jóvenes?
Desde principios del 2000, los oncólogos han notado un incremento en diagnósticos de cáncer colorrectal en personas menores de 50 años, a menudo sin factores de riesgo clásicos como obesidad o antecedentes familiares. Esta nueva hipótesis bacteriana podría explicar por qué personas jóvenes, aparentemente sanas, están desarrollando la enfermedad.
Los cambios en los estilos de vida modernos, incluyendo la mayor exposición a antibióticos en la infancia, dietas pobres en fibra y el aumento de enfermedades infecciosas gastrointestinales, podrían haber contribuido silenciosamente a este fenómeno.
¿Se puede prevenir?
Aunque aún se necesita más investigación para establecer recomendaciones específicas, los expertos sugieren algunas medidas de cuidado intestinal desde temprana edad:
Fomentar una dieta rica en fibra (frutas, verduras, legumbres).
Reducir el uso innecesario de antibióticos, siempre bajo supervisión médica.
Fomentar el consumo de probióticos naturales (como yogur o kéfir).
Evitar el consumo excesivo de alimentos ultraprocesados y azúcares refinados.
Promover revisiones médicas si existen síntomas gastrointestinales persistentes.
Además, reconocer las señales de alerta tempranas del cáncer colorrectal es vital. Algunos síntomas incluyen cambios persistentes en el hábito intestinal, sangrado rectal, dolor abdominal recurrente y pérdida de peso inexplicada.
El futuro de la investigación
El equipo de UCSD continúa estudiando la relación entre infecciones específicas y cambios a largo plazo en el microbioma. Su objetivo es identificar biomarcadores que permitan detectar a tiempo a quienes tienen mayor riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en edades jóvenes.
Esta línea de investigación no solo podría revolucionar la prevención de uno de los cánceres más letales, sino también destacar la importancia de proteger la salud intestinal desde los primeros años de vida.
